La contribución del 1% es un signo de pertenencia a la Iglesia. Los católicos somos corresponsables, con nuestros talentos y nuestro aporte material, en el cumplimiento de la misión entregada por Jesucristo: «Vayan y hagan discípulos míos a todos los pueblos de la Tierra».
Es una manera de participar y colaborar con las actividades pastorales. Todos los bautizados debemos ser corresponsables con la misión de la Iglesia entregando el 1% de nuestros ingresos mensuales. Tú le das vida a tu Parroquia y a tu Iglesia.