¿Has pensado en cuánto va a gastar en Navidad este año? La pregunta mejor a pedir que no es cuánto tenemos previsto pasar esta temporada de vacaciones, pero lo poco.
Tome un tiempo para hacer las lecturas de cada día del Adviento. Las hermosas palabras de Isaías están garantizadas para inspirar, y el compromiso le garantizará un poco de tiempo de tranquilidad y reflexión.
- Haga su lista de compras … y mejórala. Saber lo que usted necesita para comprar y seguir con el plan es el primer paso para ahorrar dinero en cualquier viaje de compras. No compra por impulso. Ademas, inicie la estación con una lista para priorizar lo que usted quiere en verdad espiritualmente, así como también en relación a sus amigos y a su familia, en el Adviento.
- Evite uso de su tarjeta de crédito o el pago en cuotas. No se endeude por los gastos navideños! No haga la Navidad en peso para el futuro. El gozo de dar un regalo que cuesta demasiado se convierta en una pesadilla por los intereses que se acumula. En otras palabras, no gasta dinero que usted no tiene.
- Compre regalos responsables. Deseche todos los “extras” y la fantasía de la Navidad perfecta. Usa metas claras que traigan crecimiento y paz, y un tiempo de calidad. Hay muchos regalos para niños que rápidos están olvidados en el closet. Escoge un regalo que no este así.
- O, mejor, haga sus proprios regalos! Se puede recoger las semillas de flor, los pone en un sobre e incluir instrucciones de siembra. Haga un libro digital de cocina de la familia con recetas miembros de la familia. Dé el regalo de los recuerdos. Se puede trasladar viejas películas caseras en DVD y actualizarlos – un gran regalo para sus padres y abuelos. Gire viejas fotos de la boda de sus padres en una presentación digital con música. No se puede poner un precio a estos tipos de regalos. Dar el regalo del tiempo. Los mejores regalos no son los más caros. Pasar las vacaciones con un ser querido, o un vecino que no puede salir. Simplemente estar ahí, pasar el tiempo, y ofreciendo el compañerismo y el buen rollo se va a evitar la soledad de alguien que preferiría que su acompañamiento de un regalo de lujo de París o Ripley.

¿Envía usted tarjetas navideñas? Aún si son de una firma estándar o de una variedad de un boletín de noticias, trate de personalizar una cada día, escribiendo una nota agradable a un familiar, o a un amigo que no haya visto durante largo tiempo.
Acérquese al Sacramento de la Reconciliación. Esto le motivará a reflexionar sobre su vida, sus dones y dónde falla al utilizarlos para el bien de otros. Esta es una preparación maravillosa para la llegada de Jesús y el inicio de un nuevo año.
Ore a Dios por paciencia. Mientras navega por una tienda atestada de gente, tome tiempo para rezar por quienes están a su alrededor y por aquellos que luchan con mucho menos recursos. Haga conciencia de las personas que le rodean y elévelas en oración en lugar de verlas como obstáculos para sus metas.
En medio de una época de abundancia, no se olvide del pobre en su comunidad.