
Mientras que visité a la familia Tapia- Aguilera, estuvo también de visita Encarnación Moll. Encarnación nunca vivió en el barrio nuestro, pero ha trabajado aquí. Ella era la secretaria de la Congregación de Santa Cruz cuando Padre Gerardo Whelan, C.S.C. y, luego, Padre Roberto, Gilbo, C.S.C. eran superiores de la Congregación en Chile.
Nativa de España, Encarnación nació en Granada. De niña, se murieron sus padres, y ella fue adoptada por una familia en la isla de Menorca. Ella vivía allí 20 años. Ella se unió con un grupo de misioneros seculares en Salamanca, y vino a Chile en 1967, contratada por Cardenal Raúl Silva Henriquez para administrar la Casa Francisco Javier, un casa de retiros. Se convertió la casa en una casa de jornadas y estudios para obispos, políticos, y campesinos.
Después de cinco años, Encarnación tomó vacaciones en España, y regresó a Chile en el principio de 1973. Al regresar a Chile, Encarnación empezó a trabajar con ICIRA (Instituto de Capacitación e Investigación en Reforma Agraria). Ella estuvo en Chile durante el golpe, y, dado el golpe, el trabajo duró pocos meses. Encarnación dejó ICIRA, pero permaneció en Chile.
A invitación de Monseñor Enrique Alvear, Encarnación fue invitada a trabajar como secretaria del Comité Pro Paz. Luego, Padre Patricio Cariola, S.J. (que posteriormente ganó el Premio Nacional de Educación) la llevó a servir como secretaria en el CIDE (Centro de Investigación y Desarrollo de la Educación, que actualmente es parte de la Universidad Alberto Hurtado). El CIDE se convertió en un lugar de varios detenidos ilustres como Padre Cariola, Padre Fernando Salas, S.J., y Padre Gerardo Whelan, C.S.C. Padre Gerardo trabajaba en el CIDE hasta que fue elegido superior de la Congregación en Chile, y él llevó Encarnación como su secretaria.
Encarnación trabajaba en la oficina de la Congregación que estaba en el mismo lugar de mi residencia. Padre Gerardo, famoso por su mal manejo de Castellano, necesitaba una buena secretaria para corregir su gramática. Después del tiempo de Padre Gilbo, Encarnación regresó a España a trabajar algunos años como la convenía en cuanto de su jubilación trabajar allí unos años más.
Encarnación mantiene una fuerte amistad con la familia Tapia-Aguilera. La Carmen Aguilera, quien actualmente es su apoderada por el hogar donde vive hoy día, se considera a la Encarnación como su «madre, amiga, y hermana».
El servicio que Encarnación ha brindado a la Iglesia en Chile y a la Congregación de Santa Cruz, en particular, es fuerte. Ella ha colaborado con un listado de sacerdotes y consagrados importantísimos durante el tiempo del gobierno militar.
Padre Cristóbal esta publicando un retrato de personas del barrio todos los días en 2014 como una forma de participar en la Misión Territorial. Nuestro barrio está lleno de personas interesantes que contribuyen de diversas maneras a la comunidad. Él va a visitar a los activos en la parroquia, así como aquellos que no participan mucho en la parroquia, y, en unos pocos párrafos breves, intenta compartir algo de su historia y quienes son y lo que somos como una comunidad.